Como hemos mencionado anteriormente, ahorrar es complicado y si no sabemos administrar el dinero lo es más, cada que recibimos un pago, ya sea por quincena, catorcena, semana, de diario o incluso por proyecto, es necesario tener en cuenta las necesidades que hay que solventar.
Pagar rentas, alimentos, transporte y los servicios como drenaje, electricidad, telefonía e internet pueden reducir drásticamente tus fondos y es posible que más de una vez hayas sufrido para llegar al final de quincena o del mes porque no supiste cómo controlar tus hábitos de consumo.
Y es que, de acuerdo a un informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México es uno de países que más horas trabaja con poco más de 2200 horas laborales al año y aún así el nivel de productividad que tiene el país es mínimo, pues genera un ingreso familiar de USD $12,850, un monto debajo del promedio de los países pertenecientes a la OCDE.
El salario mínimo en el país es el más bajo del continente americano y no alcanza a cubrir los estándares del Estado, además de que se ha estancado la capacidad adquisitiva en los últimos 40 años.
Aunado a esto, las malas costumbres de gastar innecesariamente, no prever, mal administrar el dinero, seguir pensando en el presente o de consumir productos por estar enganchado a alguna marca, perjudican nuestras finanzas y duplican nuestros esfuerzos para ahorrar o no gastar todo el efectivo de una vez.
Para hacer rendir una quincena, o el tipo de pago que tengas, es necesario que tomes en cuenta estos puntos:
- Presupuesta lo que tienes y divide tu ingreso. Es necesario que priorices tus gastos, por ejemplo, ¿cuánto gastas en renta y servicios?, ¿tienes deudas?, ¿cuánto sueles gastar diario en comida?
- Si no puedes ahorrar por tu cuenta, abre una cuenta de inversión o de ahorro y automatízala, así podrás comenzar a ahorrar sin darte cuenta y sin restringirte de una gran cantidad de dinero.
- Evita caer en la tentación y aprende a distinguir entre gustos y necesidades, hay veces que es mejor decir que no, y no comprar esas rebajas o promociones en tiendas si sabes que faltan 10 días para el próximo pago y ya te queda menos de la mitad de la quincena.
- Evita los tarjetazos, no es dinero real. Algún día podría sacarte de un verdadero apuro, pero acumular deudas es la peor forma de sobrevivir.
- Deja de gastar más de lo que ganas.
- No cargues con tus tarjetas a todos lados, pues es bastante probable que gastes de más sin darte cuenta. Lleva una cantidad específica de efectivo para limitar tus gastos hasta que te encuentres más estable.
- Elimina las deudas, aunque sea una a la vez. Vivirás más relajado y pronto verás cómo es que tu dinero comienza a rendir más.
- Identifica en qué estás gastando de más, tal vez, es momento de dejar de ir a desayunar, comer o cenar a restaurantes todos los días. Desde la cuenta hasta una propina, es dinero que estás gastando y quizá sea más conveniente para ti cocinar un par de veces a la semana en casa, prepararte el café o incluso dejar los taxis y subir al transporte colectivo.
- Comprométete y fija metas. Tal vez no comprarás un auto la primera vez que lo intentes ,pero podrás acercarte a una financiación o a un porcentaje del enganche.
- Compra solamente si te sobra dinero, y no me refiero a tus ahorros. Puedes planificar algunos gastos dependiendo de las temporadas, utiliza a tu favor las promociones por la época, como el día de las madres o el final de temporada en tiendas departamentales.
- Controla tu diversión, salir todos los días puede ser un desbalance a tu economía y si no puedes hacer esto, limítate a un trago menos, una noche menos, cambia de lugares o incluso organiza una reunión con tus amigos para dividir gastos.
- Mantente tranquilo. Puede que los días de austeridad valgan la pena y puedas comenzar a optimizar tus finanzas de una forma más prudente y quizá comiences a ahorrar o a dejar de gastar tanto.
La vida pasa muy rápido y si no te detienes a mirar a tu alrededor, es posible que te la pierdas. Solo recuerda que no tienes que renunciar a todas las cosas en tu vida con el fin de tener cosas o generar mucho dinero; sólo hay que saber elegir estrategias para que tu gasto mensual sea inferior a su ingreso.