21
feb '17

Renegociar tus deudas bancarias sí es posible

Las deudas bancarias son un problema que una vez que empieza, parece nunca tener fin. Primero, los bancos ofrecen todas las facilidades para obtener una tarjeta de crédito, y poco a poco es más difícil pagar los intereses. Así, la deuda comienza a crecer hasta que solo es posible pagar el mínimo y a veces ni eso. Sin contar que, muchas veces la deuda no es de una sola tarjeta, sino de varias. ¿Te suena familiar?

Según la Comisión Bancaria y de Valores, a finales del año pasado el índice de morosidad en la banca mexicana disminuyó un 2.42%. Este ha sido su nivel más bajo en 5 años, mientras que la cartera de tarjetas de crédito aumentó un 5.14%.

Lo anterior refleja que el mercado interno mantiene su fortaleza y que la inflación no dista de los niveles mínimos. Así, aunque el panorama sigue pareciendo gris, los mexicanos han comenzado a buscar alternativas para usar de una mejor manera sus tarjetas de crédito, evitar endeudarse y liquidar sus adeudos de la forma más práctica.

Las deudas son un problema que una vez que empieza, parece no tener fin, sin embargo hay formas de negociar para evitar que aumenten y poder liquidarlas.

Si bien las deudas bancarias pueden convertirse en un problema que resulte en una verdadera crisis, existen maneras de negociar con tu banco para evitar que sigan creciendo y sea más probable que las liquides en menor tiempo por completo. A continuación te contamos cómo.

1. Registra el monto exacto de tus deudas bancarias, incluyendo la tasa de interés mensual. (En caso de no conocer el dato, puedes consultarlo en tu estado de cuenta). De esta forma puedes tener una visión clara del asunto y abordarlo de la forma más objetiva.

2. Haz un listado de deudas bancarias de la mayor a la menor y en ella agrega el pago mínimo que acepta el banco.

3. Haz un análisis de tus finanzas para considerar con cuánto dinero cuentas mensualmente. Toma en cuenta solamente tus ingresos regulares y si trabajas de forma independiente, estima como base un mes en el que tu ingreso sea bajo.

4. Con base en lo anterior, calcula tus gastos lo más exactamente posible y trata de descartar gastos innecesarios.

Con este análisis, tendrás una evaluación completa de tu capacidad de pago y podrás tomar una mejor decisión para comenzar a solucionar tus deudas bancarias. Si esta te permite cubrir solo los pagos mínimos será más complicado y tardado liquidar la deuda pues solo estarás pagando los intereses.

Por ello, la mejor manera de abarcar la mayor parte de tus deudas será concentrarlas. De esta manera será más sencillo tratar el asunto en un solo banco con una sola tarjeta de crédito a liquidar. Lo segundo será buscar la forma de pagar lo menos posible por dicho crédito.

¿Cómo reunir todas tus deudas en una sola tarjeta? Es más sencillo de lo que parece. En muchas ocasiones los mismos bancos te ofrecen esta opción de financiamiento. Con esto no solo tendrás una tasa de interés más baja, también podrás hacer una sola cuota mensual, que si bien aumenta el plazo para liquidarla, disminuye significativamente.

En caso de no poder consolidar de esta forma tus deudas, destina la mayor parte de tu presupuesto a la deuda con mayor tasa de interés. De esta manera evitarás que tu principal deuda siga generando intereses altos. Otra opción son los programas de Pagos Fijos que ofrecen los mismos bancos, solo pregunta si eres candidato para participar en alguno.

Como ves, existen muchas maneras de evitar que las deudas bancarias te consuman, solo es cuestión de organizar tu presupuesto y utilizarlo solo para lo realmente necesario. Buscar la mejor forma de pagar lo menos posible sin que los intereses crezcan, y dejar como última opción el pago mínimo de tu crédito.